En este sentido, la edición conlleva las siguientes acciones:
• Verificar que en el texto figuren solo las ideas estrictamente pertinentes.
• Cuidar la unidad de sentido, es decir, preservar la inteligibilidad del texto (evitar introducir sin necesidad digresiones).
• Eliminar del texto la ambigüedad (un escrito debe poseer una sola interpretación).
• Usar conectores y signos de puntuación para lograr un texto más fluido.
• Cuidar de que un texto formal no contenga palabras demasiado coloquiales o que en un escrito informal haya un uso excesivo de palabras rebuscadas.
• Cuidar de que los párrafos no sean demasiado largos o exageradamente cortos y que además haya un equilibrio entre ellos, y, por otro lado, que estos cuenten con la adecuada puntuación.